jueves, 25 de abril de 2013

Maltrato


Unas letras que junté para los amigos de CulturArte Barbate y el homenaje que se le dio a José Luis Sampedro

Maltrato

No sé si sabrás cada golpe que te dieron
Algún día el tiempo dejará de insultarte
Cada vez que una lágrima caiga en el cielo
Y tus labios secos dejen de irritarse
Quizás el mar que te bendice se sume a tu regreso
En cada humillación que te hagan las olas
No sé si quiera quién mancilló tu cuerpo
Siendo la más bella de todas las rosas

¿Quién secó tu primavera en cada grito?
¿Quién mutiló tus manos y tus piernas¿
¿Quién bailó en tu tumba en cada rito?
¿Quién hizo asesinar tu calavera?
¿Quién profanó tu cuerpo de adolescente?
¿Quién dejó que tu pelo se pudriera?
¿Quién mató el llanto en cada pesadilla?
¿Quién denigró el silencio de tu guarida¿
¿Quién cegó con caricias negras tu huida¿
¿Quién sacó de tus labios el cielo de tu risa¿

¿Quién desnudo tu frente en cada estío?
¿Quién desató un mar de versos impíos?
¿Quién tuvo la suerte de tocarte¿
¿Quién tuvo la desdicha de ahogarte?
¿Quién cortó tu corriente helada?
¿Quién penetró el cuchillo de la estacada¿
¿Quién deseó verte inerte y descarnada?
¿Quién fue¿ dime pueblo ¿quién fue?
Quién acabó con tu esperanza.

lunes, 22 de abril de 2013

“Fort Apache”, el Bizco y las tablas de madera


Mi artículo publicado en El Independiente de Cádiz, 19/04/13

En los 75 años de historia reciente, Barbate ha experimentado grandes cambios como pueblo costero.  Ha vivido épocas de penurias y esplendor económico. Prueba de esos momentos se halla en los edificios que han quedado como resorte de su pasado más inmediato. Vestigios de una época que, a pesar de todo, muchos añoran. Sin ir más lejos, y cual si fuera el último Mohicano, el vetusto Teatro-Cine Avenida se alza hastiado en la avenida del Río, pudriéndose por dentro y denigrándose en cada sala, cada escalera, cada pasillo…

domingo, 14 de abril de 2013

VIVA ESPAÑA!

A estas alturas de la película la verdad que me da igual ceder. No me importa negociar si ello conlleva recuperar valores y formas perdidas o romper ese desencanto que mas bien es un tú sigue mirando para otro lado mientras me llevo tu cartera. El sistema que tenemos no funciona, se ha quedado obsoleto o quizás nunca hemos querido ver que ya venía defectuoso de fábrica.

Me siento tan español como cualquiera, andaluz, gaditano y barbateño. Nadie me lo puede quitar. Soy español, aunque no comulgo con un sistema que hace ser desiguales ante la ley, por mucho que ponga lo contrario la prostituida constitución. Si un caudillo, dictador, que en 40 años oprimió, veía con buenos ojos la monarquía, lo dice todo.

Un monarca que, dicen muchos, ha hecho mucho por España, y no digo que no, pero añado primero por su cabeza y después por España. De elefantes, yernos, yates, bribones, crápulas y demás sátiras no voy a hablar en esta ocasión, pero, como bien dice un amigo mío, hoy día hace falta una república moderna.

No mirar al pasado sino al presente y el futuro. Una república que haga a todos iguales ante la ley, no se trata de quemar iglesias ni desvalijar a curas, ese es otro menester, se trata de conseguir democracia y libertad. Y que los impuestos no vaya al de la corona de la Edad Media. República actual y sin fisuras, y cediendo. Si la bandera debe ser roja y gualda y olvidar la tricolor, por mí ya está olvidada. Lo importante es no consentir más cortinas de humo y ser leales a un estado que, dividido en sentimientos, está harto pagar para que otros se de la vida padre y vivan a cuerpo de rey. Y sí, aunque no agunte las desigualdades sociales derivadas de un sistema monárquico, yo también soy español y grito ¡VIVA ESPAÑA! (sin acento en la P)